viernes, 16 de abril de 2010

Defunción de funciones.

Ya había manifestaciones para que pusiera fin a tanto verso de amores y desamores.
Así que...

Defunción de funciones,


Y ya tenemos tres millones
de funcionarios sin funciones,
que no curran ni a empujones.
Ni a su encargado encargándose
de machacarles los riñones
por sus vitalicias retribuciones
(¡¡SERÁN CABRONES!!).
Y ahí están, rascándose
la panza y los cojones.
Y con no pocas vacilaciones,
desperezando ensoñaciones,
terminan la jornada acordándose:
“¡Bien! ¡Mañana vacaciones!”


Y podría seguir... pero me ha entrado pereza en verso a montones...
(a riesgo de fomentar la enemistad con el 20% de la población española directa y del 50% indirecta, como poco...)

2 comentarios:

  1. Je, je. Me alegro que te desencasilles, Francesc. Te conocí en poetas anónimos y siempre estabas muy "tenso"; parecías más preocupado por el número de sílabas y las rimas, que transmitir con naturalidad...

    Pero cuando te sueltas, se descubren versos más puros en intención (en este caso crítica) y en creación (aunque no tengan métrica y rima consonante al gusto clásico).

    Prueba a reescribir estos versos en un soneto, seguramente no tendrías la más mínima dificultad técnica en hacerlo, ¿pero tendría la misma guasa?

    Pd.
    Gracias por pasarte por mis cuentos, entre tantos que sigo perdí tu pista. Retomo tu hilo.
    Un abrazo.

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  2. ¡Buen día Federico!

    Creo que, por gusto y opinión, estoy en el lado opuesto al tuyo...

    Cierto que, tanto al leer como escribir, necesito centrarme en lo estricto. Soy de los que, al leer más de dos poemas abstractos o faltos de melodía o libres (aunque tengan mucha "intención" y "naturalidad") prefiero coger un libro o ensayo, donde la "intención" y "naturalidad" predominan y para buen disfrute.

    Es verdad que, la mayor parte de las veces (ahora, al empezar a escribir poesía) se cae en un exceso de rebúsqueda de lo estricto, pero lo prefiero al ser un continuo aprendizaje de la teoría y no un eterno anclado en versos libres. Para eso, ya te dije, me voy a otro género.

    Habrá muchos que me refuten pero, estoy seguro, hay otros muchos que están de acuerdo.
    Prefiero que me salga un buen poema (en todos los sentidos) de cada 20 que escribo que no agotarme en poemas abstractos o poemas libres en cuanto a métrica que bien podrían ser un mínimo fragmento de una minúscula página del más mísero de libros novelísticos.

    Yo te voy siguiendo... Y como te dije, muy lindo los "Desafíos" con tu hija.

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